Ir directamente a la información del producto
Travel Cleaner

Travel Cleaner

Addicted Toys - Ducha anal

Precio de oferta  12,59€ Precio habitual  14,95€
Formas de pago
  • American Express
  • Apple Pay
  • Google Pay
  • Maestro
  • Mastercard
  • PayPal
  • Shop Pay
  • Union Pay
  • Visa

Envíos discretos

Devoluciones flexibles

Características de Travel Cleaner

Porque hasta las travesuras más sabrosas merecen su ritual… este enema está aquí pa’ hacerte la limpieza tan placentera como el juego que viene después.
Hecho con TPR hipoalergénico, sin ftalatos, sin látex, sin poros y sin tonterías. Cómodo, práctico y suavecito, ideal si estás empezando o si simplemente te gusta hacerlo bien.

Su punta fina y cónica reparte el líquido como Dios manda, y se separa fácilmente de la pera para que todo quede limpio sin dramas. Con una capacidad de 250 ml, tienes más que suficiente pa’ dejarlo todo a punto.

¿Quién puede usarlo? Cualquiera con ganas de pasarlo bien y cuidarse. Llénalo con lo que sea seguro para el cuerpo y dale alegría al cuerpecito… que la limpieza también puede ser parte del morbo.

Información adicional

¿Cómo se usan las duchas anales?

Antes de un buen meneíto, lo suyo es dejar la casa recogía. Las perillas o duchas anales están pensadas pa’ eso: prepararte con gusto, con mimo y sin apuros, para que puedas disfrutar del placer anal con seguridad, comodidad… y mucha más confianza.

¿Y cómo se usan? Muy fácil, miarma:

Llena la perilla con agua templadita, de esa que no quema pero calienta. Coloca la boquilla con cuidado, relaja el cuerpo, y aprieta despacito pa’ que el agua entre y limpie suavemente. Espera unos segundos, suelta, y repite si hace falta. Lo importante es que lo hagas sin prisas y con cariño.

Este momentito puede ser incluso parte del juego... una especie de ritual sexy antes del desmadre. Porque estar preparadx también puede ser muy excitante.

Y como siempre decimos en Quejío: el placer empieza mucho antes de tocarse...

Empieza cuando decides darte el gusto de hacerlo bien.

Limpieza y mantenimiento

La higiene anal también tiene su encanto, y en Quejío lo sabemos bien. Por eso, si usas una perilla o ducha anal, cuidarla es parte del juego. No solo es cuestión de limpieza, es una forma de mimarte… y de que todo esté a punto cuando llegue el meneíto.

Después de cada uso, enjuaga la perilla con agua templada por dentro y por fuera. Añade un poquito de jabón neutro, sin perfumes ni químicos raros, y dale unas sacudidas suaves pa’ que todo quede limpito. Si quieres ir a lo seguro, usa un limpiador especial para juguetes íntimos: elimina bacterias sin dañar el material.

Déjala secar al aire libre, sin prisas, y guárdala en un lugar fresco y seco, lejos de la humedad o el calor directo. Nada de esconderla con vergüenza: es una herramienta de placer y cuidado, ¡y se merece su sitio!

Porque cuando el cuerpo se prepara con gusto, el placer entra con alegría.

Customer Reviews

Be the first to write a review
0%
(0)
0%
(0)
0%
(0)
0%
(0)
0%
(0)

Conóce más productos

¿Cómo elegimos nuestros juguetes?

En Quejío no nos vale cualquier cosa. Aquí no hay batiburrillos ni catálogos sin sentido. Cada juguete que ves ha pasado nuestro “test del quejío”: tiene que ser seguro, tener chispa y estar hecho pa’ dar placer del bueno, sin rodeos ni sustos.

Nuestra selección está pensada para que encuentres justo lo que necesitas (aunque aún no sepas que lo necesitas). ¿Buscas algo pa’ jugar a solas, pa’ dos o pa’ liarla con risas y gemíos? Lo tenemos. ¿Prefieres cositas discretas o te van las emociones fuertes? También.

Clasificamos los juguetes según cómo se usan, lo que provocan, con quién los compartes o por dónde te apetece sentir. Porque el placer no entiende de normas, pero sí de ganas.

Cada categoría tiene su historia, su intención y su picante. Y si te dejas llevar… seguro que acabas encontrando algo que te hace decir "ole tú".

Nuestro compromiso de calidad

Porque el placer bien hecho… es doble placer.

En Quejío no nos andamos con tonterías. Aquí no vendemos cualquier cosa: solo seleccionamos juguetes que cumplen con lo que prometen y que están hechos con mimo, calidad y un poquito de magia (de esa que se nota).

Trabajamos con marcas que garantizan materiales seguros para el cuerpo, como la silicona médica, ABS de alta calidad o recubrimientos suaves y duraderos. ¿Pilas? No, gracias. Apostamos por juguetes recargables, con baterías que aguantan más que una noche de feria. Porque el disfrute no puede depender de una pila que se apague a mitad del “ole”.

Nos importa el planeta tanto como el placer, por eso apostamos por proveedores y productos que siguen procesos más sostenibles, con menos plástico, menos embalajes innecesarios y más compromiso medioambiental. Porque un juguete que respeta tu cuerpo y el entorno, es un juguete redondo.

Además, queremos que el sexo sea tan accesible como divertido. En Quejío encontrarás productos para todos los gustos, niveles y bolsillos, sin renunciar al arte, a la sofisticación ni al buen hacer. Desde lo más básico hasta lo más exquisito, cada juguete está aquí por una razón: nos ha conquistado.

Y sí, los probamos, los analizamos y los seleccionamos con un criterio claro: si no lo recomendaríamos a nuestra gente, no lo ponemos a la venta. Así de claro. Porque vender por vender no va con nuestro rollo. Queremos que confíes en que, elijas lo que elijas, te estás llevando calidad de la buena.Porque el placer bien hecho… es doble placer.

En Quejío no nos andamos con tonterías. Aquí no vendemos cualquier cosa: solo seleccionamos juguetes que cumplen con lo que prometen y que están hechos con mimo, calidad y un poquito de magia (de esa que se nota).

Trabajamos con marcas que garantizan materiales seguros para el cuerpo, como la silicona médica, ABS de alta calidad o recubrimientos suaves y duraderos. ¿Pilas? No, gracias. Apostamos por juguetes recargables, con baterías que aguantan más que una noche de feria. Porque el disfrute no puede depender de una pila que se apague a mitad del “ole”.

Nos importa el planeta tanto como el placer, por eso apostamos por proveedores y productos que siguen procesos más sostenibles, con menos plástico, menos embalajes innecesarios y más compromiso medioambiental. Porque un juguete que respeta tu cuerpo y el entorno, es un juguete redondo.

Además, queremos que el sexo sea tan accesible como divertido. En Quejío encontrarás productos para todos los gustos, niveles y bolsillos, sin renunciar al arte, a la sofisticación ni al buen hacer. Desde lo más básico hasta lo más exquisito, cada juguete está aquí por una razón: nos ha conquistado.

Y sí, los probamos, los analizamos y los seleccionamos con un criterio claro: si no lo recomendaríamos a nuestra gente, no lo ponemos a la venta. Así de claro. Porque vender por vender no va con nuestro rollo. Queremos que confíes en que, elijas lo que elijas, te estás llevando calidad de la buena.