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S8 Relax

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Stimul8 - Aceite para masajes

Precio de oferta  12,99€ Precio habitual  16,99€
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Características de S8 Relax

Con el aceite de masaje Stimul8 de algodón, cada caricia se convierte en un baile de placer y ternura. Su textura ligera y sedosa se desliza suave sobre la piel, dejándola nutrida, suave y lista para el juego más ardiente.

Es el compañero ideal para esos momentos íntimos donde el cuerpo pide mimo y el alma, deseo. Con cada gota, sentirás cómo la piel se relaja y se llena de un brillo natural, como un susurro andaluz en la noche que promete sorpresas.

Déjate llevar por la magia de Stimul8 y transforma cada masaje en un viaje sensual que empieza en la piel y termina en el corazón.

Ingredientes:

ACEITE DE SEMILLA DE SESAMUM INDICUM, ACEITE DE PRUNUS AMYGDALUS DULCIS, ACEITE DE SEMILLA DE SIMMONDSIA CHINENSIS, ACEITE DE PERFUME, CITRAL, LIMONENO, LINALOL, GERANIOL, HEXIL CINAMAL, CITRONELOL, EUGENOL, FARNESOL

Información adicional

¿Cómo se usan los aceites masajeadores?

Usar un aceite de masaje no es simplemente untar y frotar. Es todo un arte... sensual, cálido y muy, muy placentero. Para empezar, lo ideal es crear un ambiente íntimo: luz suave, música sugerente y muchas ganas de disfrutar. Nada de hacerlo con prisas, que esto va de saborear el momento.

El aceite no se aplica directamente como si fuera aliño. Lo mejor es poner unas gotas en las manos, calentarlas frotándolas suavemente, y entonces sí: empieza el juego. La textura sedosa y el aroma envolvente despiertan la piel y encienden los sentidos. Cada caricia debe ser lenta, consciente, recorriendo el cuerpo como si fuera un mapa por descubrir.

Si el aceite es comestible, aún mejor. Porque cuando se puede lamer, cada beso y cada roce se transforman en una experiencia para todos los sentidos. La piel se convierte en un manjar, y el placer, en un festín.

El masaje puede compartirse o disfrutarse a solas. Cualquier momento es bueno para reconectar con el cuerpo, explorar sensaciones nuevas o añadir un toque diferente a la intimidad. Y si se combina con juguetes eróticos… la experiencia alcanza otro nivel.

Así que ya sabes: un buen aceite de masaje no solo relaja, también despierta, excita y une. Dale calor al momento… y échale aceite al asunto.

Ideas de uso en la intimidad

Un aceite de masaje no es solo para relajarse... Es una excusa perfecta para jugar, explorar y encender todos los sentidos. Con un poco de imaginación (y unas gotas bien puestas), la noche puede cambiar de rumbo... y acabar por todo lo alto.

💆‍♀️ Masaje sin guión
Empieza con un masaje suave, sin rumbo fijo. Que las manos viajen, que el aceite resbale, que la piel hable. El objetivo no es relajar... es despertar.

🌡️ Juego de temperaturas
Calienta el aceite entre las manos, o usa uno con efecto calor... y observa cómo la piel responde. ¿Te atreves con el contraste? Un soplo frío después del calor... y el cuerpo se rinde.

👅 Sabores que se sienten (y se lamen)
¿Aceite comestible? ¡Oh, sí! Cada rincón puede convertirse en postre. Explora con la lengua, prueba con besos, y deja que el placer entre por todos los sentidos.

🧸 Con juguetes, mucho mejor
Combina el aceite con juguetes eróticos, plumas, vendas o lo que inspire el momento. Un buen desliz... puede ser el principio de muchas cosas.

🕯️ Ritual sensorial
Haz de cada encuentro un ritual: luz tenue, música suave, aroma envolvente… y aceite, por supuesto. No hay prisa cuando el deseo se disfruta gota a gota.

Recomendación antes de uso

Antes de dejar que el cuerpo se entregue al desliz, conviene preparar el terreno. Porque un masaje erótico puede ser explosivo... pero solo si se hace con mimo, arte y un poquito de previsión. Aquí van algunas recomendaciones para disfrutar al máximo del momento.

Piel limpia y lista
Aplicar el aceite sobre la piel limpia y seca mejora la experiencia. Se absorbe mejor, se desliza con suavidad y permite que cada caricia sea más intensa. Una ducha previa no solo prepara el cuerpo, también activa los sentidos.

Crea un ambiente íntimo
No hace falta montar un spa, pero sí cuidar los detalles. Luz bajita, música que acompañe el ritmo, una habitación cálida... y fuera distracciones. Un entorno agradable multiplica las sensaciones.

Calienta el aceite antes de aplicar
Nada rompe el clima como una gota fría cayendo por la espalda. Calienta el aceite entre las manos antes de aplicarlo para que el cuerpo lo reciba como una caricia desde el primer contacto.

¿Es comestible? Compruébalo
Si hay intención de besar o saborear, es importante asegurarse de que el aceite sea apto para juegos orales. No todos están pensados para eso, así que mejor confirmar antes de lanzarse al festín.

Haz una prueba en la piel
Antes de aplicar el aceite por todo el cuerpo, prueba una pequeña cantidad en una zona discreta. Así evitas posibles reacciones o molestias que puedan interrumpir el momento.

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¿Cómo elegimos nuestros productos?

En Quejío no nos vale cualquier cosa. Aquí no hay batiburrillos ni catálogos sin sentido. Cada juguete que ves ha pasado nuestro “test del quejío”: tiene que ser seguro, tener chispa y estar hecho pa’ dar placer del bueno, sin rodeos ni sustos.

Nuestra selección está pensada para que encuentres justo lo que necesitas (aunque aún no sepas que lo necesitas). ¿Buscas algo pa’ jugar a solas, pa’ dos o pa’ liarla con risas y gemíos? Lo tenemos. ¿Prefieres cositas discretas o te van las emociones fuertes? También.

Clasificamos los juguetes según cómo se usan, lo que provocan, con quién los compartes o por dónde te apetece sentir. Porque el placer no entiende de normas, pero sí de ganas.

Cada categoría tiene su historia, su intención y su picante. Y si te dejas llevar… seguro que acabas encontrando algo que te hace decir "ole tú".

Nuestro compromiso de calidad

En Quejío no nos andamos con tonterías. Aquí no vendemos cualquier cosa: solo seleccionamos juguetes que cumplen con lo que prometen y que están hechos con mimo, calidad y un poquito de magia (de esa que se nota).

Trabajamos con marcas que garantizan materiales seguros para el cuerpo, como la silicona médica, ABS de alta calidad o recubrimientos suaves y duraderos. ¿Pilas? No, gracias. Apostamos por juguetes recargables, con baterías que aguantan más que una noche de feria.

Nos importa el planeta tanto como el placer, por eso apostamos por proveedores y productos que siguen procesos más sostenibles, con menos plástico, menos embalajes innecesarios y más compromiso medioambiental. Porque un juguete que respeta tu cuerpo y el entorno, es un juguete redondo.

Y sí, los probamos, los analizamos y los seleccionamos con un criterio claro: si no lo recomendaríamos a nuestra gente, no lo ponemos a la venta. Así de claro. Porque vender por vender no va con nuestro rollo. Queremos que confíes en que, elijas lo que elijas, te estás llevando calidad de la buena.

Porque el placer bien hecho… es doble placer.